viernes, 20 de agosto de 2010

Purísimas paradojas (putísimas, hasta el corrector quiere imponer)

¿Ese es tu walkman? –Qué moderno que es.
Todo muy superado, muy liberal.



Caravanas de preguntas.
Pensá en nada.
La consigna falla, debiera ser otra, si fuera posible.
La mente intrincada no da respiro,
da luces de colores, pero todas tienen una misma lámpara detrás.

Si camino sin esquivar charcos, me mojo, sin dudas.
Mojate.
Pero cuidate.
Pero no vayas a dejar de ir saltando charcos, disfrutando de la vida.
No te vayas a enfermar
(¿De desidia? ¿De hastío?)

Sin decir todo lo que pensás,
Sin mirar todo lo que ocultás,
Sin querer descifrar acertijos.
Sin romper hechizos.

Pero,
liberá tu mente.
Entonces,
decí, mirá, no escondas.
Entendé las metáforas o lucí tu rubia cabellera al viento.
Creé en cuentos de hadas, pero comprate tu propio caballo,
que al príncipe se le hizo tarde.

Si esto fuera una paradoja, con status de tal, sería un problema filosófico.
Si no llega ni a eso, ¿en qué kiosco lo venden?

Llamame, no me llames, mirame, no me mires.
Mimame, no me mimes. Deseame, pero no tanto.
No me dejes dormir, no me despiertes.

Comé, crecé, jugá, estudiá, trabajá, hacé, mirá, reí, leé.
Caminá, viajá (fotografiá), contá, callá.
Queré pero que no se note tanto.
Bueno, un poco sí.
Bueno, tanto no.

¿Cómo es?
Claro que nadie va a responder.
No tiene respuesta en el imperativo, no puede contestarse.

Está todo en tu cabeza.
(Prendé la tele y se te pasa)
La obra de teatro, la peli de Godard.
Ay, qué cultural.
¿Esquizoide?
¡Neurótico normalizado!

Cortenla, déjennos vivir en paz, saquenla, saquenla un poquito,

saquenla un poquito.

1 comentario:

  1. "Creé en cuentos de hadas, pero comprate tu propio caballo, que al príncipe se le hizo tarde!"
    Que bueno.
    Por eso te quiero.

    ResponderEliminar