sábado, 28 de agosto de 2010


Árbol – hoja – salto – luz / aproximación.



Si las palabras se desordenan, forman, aún los mismos sonidos, una extraña y nueva combinación, que puede desentonar con el sentido pretendido.

Es mágico entonces el arte de decir las palabras de la manera en que sus sonidos se vuelven armónicos al oírlos, y los ojos que lo leen se vuelven sonrisas.

Pero pueden resultar trampas mortales también. Enredaderas sin fin, trazos lúgubres o gritos profundos.

Mis enormes respetos entonces a las palabras.

Y, perdone la ciencia mi pensamiento mágico, disculpe la epistemología que algunas veces prefiera el espíritu a la materia, pero hay quienes pronuncian, escriben, dictan, piensan, enuncian, convocan con un halo de exquisitez que no puede ser engalanado más que con la maravilla de la ensoñación.

Las más simples suelen resultarme las más bellas.

O acaso, las que resuenan por días enteros, sin romperse ni ajarse…


Los amigos

En el tabaco, en el café, en el vino,
al borde de la noche se levantan
como esas voces que a lo lejos cantan
sin que se sepa qué, por el camino.

Livianamente hermanos del destino,
dióscuros, sombras pálidas, me espantan
las moscas de los hábitos, me aguantan
que siga a flote entre tanto remolino.

Los muertos hablan más pero al oído,
y los vivos son mano tibia y techo,
suma de lo ganado y lo perdido.

Así un día en la barca de la sombra,
de tanta ausencia abrigará mi pecho
esta antigua ternura que los nombra.

Julio Cortázar.

viernes, 27 de agosto de 2010

Mayo/08


El miedo no es bobo, el susto tampoco.

Sé que la fragilidad es la parte que más me asusta de la locura.

Sé que me sumerjo en aguas profundas a nadar despacio sin horas ni tiempos que clamen por la presencia de un ausente presente hasta el hartazgo de la eternidad misma.

Las voces que llamen no serán nunca las mismas, las palabras sin embargo… parecen grabadas, tortuosas, en las palmas de sus manos.

Los ojos que no miran, ni ven ni hacen daño, ni sienten sigilosa a la presa que se acerca, las miradas en cambio, que cambian de epopeya, que sueñan caracoles en un mar de destierros inútiles, son siempre inmutables, aunque bellas.

Música de aromas distinguidos de su especie. Caminos de piedras coloridas que riman en un soneto tardío, jamás leído, jamás escrito.

Cartas de amores desencontrados, espacios blancos de torres negras. Alfiles que levantan rituales danzados sin pies ni manos ni agua ni aire.

Caminos hermanados, corazas sin sueños de papel ni de cartón, ni de nada que las salve de dejar de ser lo que son. Caminos que sinuosos, despiertan multitudes de preguntas dolientes, de respuestas brillantes de sangre y barro. Se caminan amargos con las voces grabadas, con los ojos bien ciegos de huecos incendiados, con la música sorda de poemas no dichos, con la sabia paciencia de quien conoce lo estéril de esa tierra.

Simetrías en laberinto de espejos


Fragilidad.
Estabilidad.
Equilibrio.
Cuerda floja.
Helicóptero sin hélice.
Vasos rotos, cristales estallados, caminos clausurados.

Crash.

Sarampiones.
Silencios.
Tormenta de viento.
Arena y nada de sol.

Plaff.

Chocan tazas, vidrios entallados, rutas empalmadas.
Alas sin avión.
Un enfermero junta caracoles sin olas.
Desequilibrio.
Caídas.
Docilidades.

miércoles, 25 de agosto de 2010

El deseo de la jirafa - cuento Hadza


Leyendo algunas cosas encontré este cuento, que me gustó mucho...


Después de haber creado a todos los animales, Dios preguntó a cada uno de ellos si tenía alguna petición que hacerle.
La jirafa dijo:
- Señor, mi deseo es tener sabiduría.
- Bien dicho -respondió Dios-. A partir de ahora no hablarás, pues los charlatanes son unos necios. En cambio, los sabios callan.
Por eso la jirafa lo ve y lo oye todo, pero nunca emite ningún sonido.

lunes, 23 de agosto de 2010

O outro


Eu não sou eu nem sou o outro,
Sou qualquer coisa de intermédio:
Pilar da ponte de tédio
Que vai de mim para o outro.

Fernando Pessoa

viernes, 20 de agosto de 2010

Purísimas paradojas (putísimas, hasta el corrector quiere imponer)

¿Ese es tu walkman? –Qué moderno que es.
Todo muy superado, muy liberal.



Caravanas de preguntas.
Pensá en nada.
La consigna falla, debiera ser otra, si fuera posible.
La mente intrincada no da respiro,
da luces de colores, pero todas tienen una misma lámpara detrás.

Si camino sin esquivar charcos, me mojo, sin dudas.
Mojate.
Pero cuidate.
Pero no vayas a dejar de ir saltando charcos, disfrutando de la vida.
No te vayas a enfermar
(¿De desidia? ¿De hastío?)

Sin decir todo lo que pensás,
Sin mirar todo lo que ocultás,
Sin querer descifrar acertijos.
Sin romper hechizos.

Pero,
liberá tu mente.
Entonces,
decí, mirá, no escondas.
Entendé las metáforas o lucí tu rubia cabellera al viento.
Creé en cuentos de hadas, pero comprate tu propio caballo,
que al príncipe se le hizo tarde.

Si esto fuera una paradoja, con status de tal, sería un problema filosófico.
Si no llega ni a eso, ¿en qué kiosco lo venden?

Llamame, no me llames, mirame, no me mires.
Mimame, no me mimes. Deseame, pero no tanto.
No me dejes dormir, no me despiertes.

Comé, crecé, jugá, estudiá, trabajá, hacé, mirá, reí, leé.
Caminá, viajá (fotografiá), contá, callá.
Queré pero que no se note tanto.
Bueno, un poco sí.
Bueno, tanto no.

¿Cómo es?
Claro que nadie va a responder.
No tiene respuesta en el imperativo, no puede contestarse.

Está todo en tu cabeza.
(Prendé la tele y se te pasa)
La obra de teatro, la peli de Godard.
Ay, qué cultural.
¿Esquizoide?
¡Neurótico normalizado!

Cortenla, déjennos vivir en paz, saquenla, saquenla un poquito,

saquenla un poquito.

82% Móvil

Memo dice que hay que ir por más:

http://www.noticiasdelsur.com/2010/08/82-movil/

Yo digo que si, pero que necesito una reunión de actualización doctrinaria y coyuntural

Zapping















Lunática
Histriónica
Catatónica.

Una jirafa en pantuflas
y tu mal humor.

Una cadena de favores que perdió el eslabón.

Cuadernos anaranjados
Porque el amarillo ya no les queda.

Y tu mal humor.

La guitarra sorda,
(Muda la compraste, sorda la dejaste.)

Merengue
Sal-pimienta-sal
Delicias sin probar.

Política y/o violencia.
Camino a Pilar.

Y tu mal humor.

miércoles, 18 de agosto de 2010

Cuando podrás amar – Las Pelotas

El otro día uno de mis pequeños alumnos de 8 años cantaba muy copado un tema de SUMO, y se lo enseñaba a sus compañeros, mientras les contaba… “cuando el jefe de SUMO se murió, los que eran de la banda quedaron en dos: Separados y Pelotas”. Jaja. Un groso Felipín.

Hoy escuché este tema de Pelotas en 678 y me acordé lo mucho que me gustaba, dejo a Divididos para otro día…

No está mal
que bailes desnuda
sobre el agua del mar
si te quieres ver así.
Hay lugar
aunque crea que
esto no da para más,
no importa
que te rías de mí.

Cuando podrás
amar sin complejos
para salir del tedio
destapa algún sueño.

Da para más
que desear el confort
teniendo un control,
no quiero terminar así.

Caminar,
sólo andar buscando
lo que me hace bien,
el lastre vamos a despedir.

Quién nos puede decir
qué es lo correcto,
para salir del tedio
destapa algún sueño.

No está mal
que bailes desnuda
sobre el agua del mar
si te quiero ver así.

martes, 17 de agosto de 2010

Ser o devenir -como si pudieran ser opuestos, maldita dialéctica-


Algunos días parecen nublados por fuera y suaves por dentro.
Como si las nubes pudieran realmente ser copos de algodón, o esos-cositos-que-comen-los-chicos-en-los-parques.

Las nubes podrían ser cualquier cosa, de hecho. Yo he visto nubes-elefantes, nubes-jirafas, nubes-bicho-bolita y muchas más.

El problema es cuando la nube es por ejemplo una nube enfundada de tormenta. Y el día deja de ser nublado para ser tormentoso. Nadie está preocupado cuando el día se torna día-elefantesco (quizás dantesco) o día-jirafales. Pero a todos se les frunce el ceño cuando es día-tormentoso.

Y la nube-tormenta no sabe ser elefante, jirafa, ni siquiera hipopótamo.
Yo creo que sabe ser otras cosas, de todos modos, debe saber ser nube-murciélago y hasta nube-vampiro… pero nada de nube-trébol o colibrí; por pensar en esas cosas que convidan a la gente a sonreír.

Las nubes de este día casi están escondidas, no por miedo o por juego, como nos escondemos nosotros; yo creo que más bien por aburrimiento.

Algo me dice que no las divierte cambiar siempre de forma, ni el mismo río, ni el mismo hombre, Heráclito amigo, aunque un rato deben de querer estar un poco a lo Parménides… quién dice…

martes, 10 de agosto de 2010

Contame un cuento que empiece con había una vez. Que siga con un castillo lleno de princesas y un dragón que las protege.
Contame un cuento en el que el vestido se arrastre por los salones del palacio en un baile bello y díscolo.
Que las hormigas hagan cosquillas a las plantas que no se dejan intimidar, aunque las vengan a pellizcar.
Un cuento con soles de primavera, con músicas de colores, con pasteles de cumpleaños y sirenas ampulosas esperando un barco en altamar.

Quiero dormirme en el son del cuento que juega con las palabras como si fueran hilos de seda que cosen y descosen los sueños de la noche, que lazan acariciando a las estrellas que se escapan de cualquier modo.

Que haya barriletes, por favor, remontados en esa playa que escucha a las olas irrompibles del tiempo eterno.

Que las colas de los cometas se adornen de espuma y dancen también, mojando al dragón, a las hormigas, a las sirenas y dejando escapar suavemente a la princesa, que toma su vestido entre sus manos y lo lleva corriendo, mientras se esconde de los caracoles y no hace más que dormirse con el mismo había una vez.

Caramelos

Caramelos ácidos.
Caramelos masticables.
Rellenos de dulce de leche.
De menta y chocolate.

Caramelos de colores.
Caramelo para el flan.
Caramelitos para la tos.
De miel y de anacahuita.

Caramelos que transitan.
Otros que se quedan.
Se escapan de los bolsillos,
Se caen de mi cartera.

Caramelos para ese nene,
de mariposas y conejitos.

Caramelos para dolores,
para alegrías y resquemores.

Caramelos son tus ojos,
redondos,
para la envidia
de soles, lunas y risas,
pegoteadas del asombro
de tanto baile, que son,
caramelos de mi amor.

lunes, 9 de agosto de 2010

Halo Lunar - L.A.S.

Resulta que a veces las propias palabras se enajenan tanto que no se oyen. Y que las de otros retumban, repican ecos de poesías.
Bueno, eso me pasa hoy. Que igual, Spinetta me hace bailar.


Tienes algo que no quieres tener...
quieres algo que no puedes tener...
quiebra esa mirada de maldad...
quiebra esa mirada de maldad...
Y hoy ví un fulgor,
que cargaba la calle,
con un halo lunar,
y ví el día que perdía su brillo,
en tus ojos cuando te pude ver...
y esto me lleva a la insanía...
Una bailarina que no quiere parar...
hace con su danza un hueco en el mar ( glup ! )
veo por allí que su fiebre paró,
está tranquilo junto al tiburón...
Y así es que vive soñando...
aquel que solo sueña y no ve...
y hoy es el momento,
que estabas esperando,
porque te puedo ver.
Once precipicios pintados de azul...
contra la araña de un amor...
una cosquilla en un mal lugar ( sí... sí... sí... sí... )
una incorregible forma de acabar.
Y hoy ví un fulgor que cargaba la calle,
con un halo lunar,
y ví el día que perdía su brillo,
en tus ojos cuando te pude ver...

domingo, 8 de agosto de 2010

Nunca sé donde empezar porque la linealidad se me escapa como se me escapan muchas cosas hoy. Creo que casi todo. En este juego parece que no tengo más que cascadas de vientos que soplan como huracanes.
Parece que estoy triste como Becquer, sin su capacidad poética.

¿Al cine?

¿A caminar?

A comprar pañuelitos. A no saber qué hacer con tanto amontonamiento de sensaciones, con nostalgias-de-sinsentidos, que duelen como alfileres finitas, pinchudas, malditas.

Con tu música a otra parte.
¿Y qué hago con la mía?

sábado, 7 de agosto de 2010

¿Será así?

¿Cómo puede ser? No tengo nada que hacer, no tengo que trabajar, ni limpiar, ni escribir, ni leer ni visitar a nadie.
No tengo que correr atrás de nada, no tengo que esperar ningún turno, no tengo que contestar ningún llamado.
No tengo que completar ningún formulario, ni pasar por el supermercado. No tengo que escribir ningún mail ni mover ningún mueble.

El ocio llena este tiempo de sábado. Pero es tan inusual, tan poco frecuente, tan armado todo siempre; que se llena el ocio de preguntas sobre qué tendré que hacer. Entonces tengo que armar un listado de cosas que no tengo que hacer. Y así el ocio desaparece y se hace obligación de nuevo.

Y ahora ya no afirmo, me pregunto: ¿no tengo nada que hacer?

viernes, 6 de agosto de 2010

Lanterna Dos Afogados

http://www.youtube.com/watch?v=n7OZBeVfgbs

Quando tá escuro
E ninguém te ouve
Quando chega a noite
E você pode chorar...

Há uma luz no túnel
Dos desesperados
Há um cais de porto
Prá quem precisa chegar...

Eu tô na Lanterna
Dos Afogados
Eu tô te esperando
Vê se não vai demorar...

Uma noite longa
Pr'uma vida curta
Mas já não me importa
Basta poder te ajudar...

E são tantas marcas
Que já fazem parte
Do que eu sou agora
Mas ainda sei me virar...

Eu tô na Lanterna
Dos Afogados
Eu tô te esperando
Vê se não vai demorar...

Herbert Vianna